El tifón Yagi, tras devastar Filipinas y Hainan (China), azotó el norte de Vietnam el 7 de septiembre con vientos superiores a los 149 km/h. Provocó la muerte de 46 personas, 22 desaparecidos y 247 heridos, además de dañar más de 8.000 viviendas. Antes de la llegada del tifón, varias infraestructuras, en particular aeropuertos y lugares turísticos, fueron cerradas, lo que provocó la cancelación de cerca de 400 vuelos.
Las provincias de Quang Ninh y Haiphong fueron las más afectadas, con daños considerables en los puertos, donde se hundieron unos 25 cruceros, provocando pérdidas por valor de miles de millones de dong. Muchos hoteles y restaurantes en estas áreas requieren meses de reparaciones. Una presa en Quang Ninh se rompió, inundando más de 400 viviendas.
El tifón también inundó más de 113.000 hectáreas de arrozales y dañó más de 1.500 hectáreas de acuicultura en las provincias circundantes. El 9 de septiembre, el puente Phong Châu en Phú Thọ se derrumbó, dejando 13 personas desaparecidas y varios vehículos atrapados. También se informaron deslizamientos de tierra en las provincias de Cao Bang y Ha Giang, agravados por las inundaciones de los ríos.
A pesar de la distancia del tifón, el riesgo de inundaciones persiste en 17 provincias del norte y se pronostican lluvias hasta el 11 de septiembre, lo que aumenta el riesgo de deslizamientos de tierra e inundaciones en áreas como Sapa y Lao Cai. Los cortes de energía también afectan a millones de personas y perturban la actividad económica.
Hoy, 10 de septiembre, los aeropuertos de Hanoi han reanudado sus operaciones normales. Sitios turísticos como Hanoi y Ninh Binh (Tam Côc – Bích Động y Tràng An…) comprobaron las condiciones de seguridad, realizaron una limpieza exhaustiva y reabrieron sus puertas a los visitantes. Los cruceros en la bahía de Halong están suspendidos a partir del 11 de septiembre, a la espera de nuevas directrices para garantizar la seguridad de los visitantes.
Para los viajeros que planean visitar el norte de Vietnam en los próximos días, es importante informarles que algunas carreteras y las fachadas de los monumentos pueden seguir sucias debido a la falta de una limpieza completa. Además, los viajes entre ciudades del norte podrían llevar más tiempo de lo habitual, ya que varias carreteras se inundarán, lo que ralentizará el tráfico o requerirá desvíos debido a cierres temporales. Tampoco se recomienda viajar a zonas montañosas del norte, ya que el riesgo de deslizamientos de tierra es muy alto. En caso de cancelación, es posible ampliar la ruta en las regiones centro y sur. Se recomienda encarecidamente trabajar en estrecha colaboración con los DMC locales para reconfirmar las reservas de hoteles y restaurantes, y ajustarlas según sea necesario, si algunos servicios aún permanecen interrumpidos y no pueden acomodar a los viajeros según lo planeado.
Aunque el calendario de viajes no puede restablecerse por completo, los DMC locales harán todo lo posible para ayudar a los viajeros y minimizar las molestias causadas por la situación, ya que las inundaciones posciclónicas persisten en la región norte de Vietnam.